La firma danesa Klint nace de una pasión por el cuidado de la piel e inspiración artística de su fundador Hans. Durante muchos años Hans vio cómo su madre transformaba meros objetos en maravillosas piezas de arte. Fue entonces cuando se decidió a fundar su propia marca de productos para el cuidado de la piel, teniendo claro, que el packaging de los mismos serían piezas de arte de diferentes artistas, para que cuando hayas terminado todo el producto, ese envase pueda ser usado como objeto decorativo.

"Disfruto de la energía positiva que me aporta el arte y ese es el sentimiento que quiero compartir con los demás a través de Klint. Por eso colaboramos con artistas, lo que difunde mensajes positivos sobre la diversidad y el cuidado personal" Explica Hans.

Todos la gama de productos han sido cuidadosamente desarrolladas por expertos daneses en el cuidado de la piel con ingredientes de alta calidad elaborados en su fábrica de Dinamarca.